domingo, 1 de noviembre de 2009

Virtualización: ¿La panacea?

Antes separábamos distintos servicios en distintos servidores, para disminuir el riesgo de una falla total de los sistemas informáticos.  Hoy la premisa es consolidar todos los servidores (convertidos en máquinas virtuales) en un gran sistema (por ejemplo: ESX farm).  Antes nos distanciábamos de conceptos como mainframes y terminales tontos (dumb terminals) pretendiendo descentralizar los sistemas informáticos de una empresa: hoy volvemos a traerlos al servidor, enseguecidos por tecnologías de TI reinantes. ¿Tiene todo esto sentido? No, no lo tiene.

Virtualizar: ¿Todo o nada?

Virtualizar sistemas y aplicaciones abre nuevos horizontes para solucionar múltiples problemas. Las tecnologías de virtualización no son nuevas, pero el desarrollo en los últimos años ha permitido que pueden ser aplicadas en una gran variedad de situaciones. El hecho que esta tecnología ofrezca tantas aplicaciones no significa que sea conveniente usarla para cualquier clase de problema. En esto no se diferencia de otras herramientas: su efectividad depende del uso que se le de.

Hay empresas que se han tomado muy en serio el "hype" de la virtualización y han decidido virtualizarlo todo: partiendo por los servidores, siguiendo por las aplicaciones y terminando en las estaciones de trabajo. ¿Es esto una práctica a seguir? No, no lo es.

La virtualización tiene sus ventajas y desventajas y hay que analizar cuidadosamente qué se gana y qué se pierde antes de utilizarla. Una política taxativa que ordene utilizar o no utilizar herramientas de virtualización es una mala política: la solución no será blanca ni negra, sino más bien una mezcla de distintas tecnologías.

En un próximo artículo describiré ventajas y desventajas de virtualización en algunos escenarios frecuentemente discutidos y utilizados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario